Saltos, aceleraciones, cambios de dirección, agilidad... El fútbol es un deporte complejo que requiere de fuerza, resistencia, velocidad, flexibilidad y un alto componente de toma de decisión.
Eres tan fuerte como lo es tu eslabón más débil. Por ello, evitar descompensaciones y limitar al máximo el riesgo de lesión es uno de nuestros principales objetivos.
Sistemas y modelos de juego de mi equipo y del rival, jugadas a balón parado, scouting de jugadores... La información es poder y en una competición igualada puede ser la diferencia entre el éxito o el fracaso.